Hoy debe de ser de los días más tristes que me ha tocado vivir en éstos últimos 15 años.
En las primeras horas de la tarde me enteré del fallecimiento de LUIS ALBERTO PADULA, o mejor dicho “Padula” como todos lo conocían.
Con Padula siempre me conectó algo muy especial; la charla de alguien que por su edad podría haber sido mi viejo y que su universidad dialéctica que siempre fue la calle, me deslumbró desde el primer momento.
Su amistad, sus consejos de vida que siempre tomé en cuenta, la humildad de los grandes fueron sus dones más característicos.
Pero siempre lo voy a recordar por las interminables charlas que teniamos y pese a que hacía un tiempo que no nos veíamos cada vez que nos encontrábamos nos quedábamos largos ratos conversando y recordando viejos tiempos.
Durante todo el día me han pasado cientos de recuerdos, de sus llegadas a las distintas emisoras donde estuvimos, sus conversanciones en las canchas donde íbamos a transmitir, el fin de año que pasamos con todos los compañeros de “Rumbo al Ascenso” en la casa de Patricia en Lagomar, el festejo con Julio Toyos abrazados como dos niños en la Platea América cuando la IASA le ganó a Peñarol y muchos lindos momentos más.
Hoy partió Padula y como el fútbol no podrá tener aficionados seguramente desde el Cielo podrá observar en una platea bien ubicada a su querida I.A.S.A.
A Violeta su compañera de toda la vida, a su hijo Julio César, a su nieto y a toda la familia de Sud América, nuestro respetuoso y fraternal abrazo
Buen Viaje querido Padula, siempre estarás en nuestros corazones