Vamos con los gauchos todavía…

 Por: Fernando Sinsolo

Desde la mañana el barrio de La Teja se mostró diferente al resto de los días. Un colorido muy especial, el cosquilleo de los hinchas gauchos con la expectativa de la vuelta a primera división marcaban lo que sería una fiesta a partir de las  18.04 cuando Javier Bentancur marcara el final del partido.

El calor y color lo brindaban ambas parcialidades con tribunas colmadas como las viejas épocas de la “B”, con los camiones del “Villa” y una marcha desde Nuevo Paris y Villa Teresa hasta el Paladino y con los locales que de a poco fueron completando la tribuna Tabaré Vázquez.

Colegas que desde hacia mucho tiempo no veíamos, también visitaron ésta última étapa del fútbol olvidado de la Segunda Profesional, tal vez por aquello de “hay que mover el fichero”.

Nuestro equipo se instaló arriba de la zona de vestuarios, escalera de por medio y desde alli la transmisión de elascenso.com comenzó en hora y además una gran retrasmisión que realizamos con El Puente 103.3 FM y con Ovacion Digital, y por si fuera poco con Gabriel Añón como invitado especial para que llevara a todos ustedes el comentario técnico-táctico de uno de los entrenadores que más sabe de nuestro fútbol.

Con el papel picado, los globos amarillos y rojos, el humo, las banderas y los bombos latiendo como un solo individuo, ingresó Progreso sobre las 15.55 al campo de juego.

Cinco minutos después con una arenga muy encendida desde el vestuario visitante, el “villa” saltó al césped gaucho, con un recibimiento estupendo de su populosa parcialidad.

Los primeros dos minutos de juego mostraron un calco de lo ocurrido pocas horas antes en la primera final, porque en treinta segundos Villa Teresa no aprovechó un mal cálculo de Carlos Techera en la salida con los puños (en el único error que tendría el arquero aurirojo) y en la contra un disparo de afuera de Joaquín Gottesman terminó con un pique traicionero que Nicolás Marticorena en buena forma envió al corner.

Progreso aprovechaba las franquicias que brindaba su rival por el sector derecho y en un error en una salida desde el fondo de Villa Teresa,  aprovechó Steve Makuka para levantar un centro medido al medio del área y allí aparecer fantasmalmente Ignacio Lemmo para con golpe de cabeza vencer a Marticorena y dejar ronca a la hinchada gaucha.

Con el uno a cero a su favor el local dispuso de una mayor tranquilidad para hacer circular el balón y solo fue sorprendido con una subida de Diego Viña que luego de un rechazo a la salida de un corner sacó un disparo que pasó muy cerca del parante izquierdo de Techera.

Pero Progreso era más en el campo, con un gran trabajo de Joaquín Gottesman en una función ambivalente de defensa y ataque y de sus pies llegó sobre los 28 minutos el segundo tanto cuando en forma exquisita colocó un tiro libre medido hacia la cabeza del “bombardero” Nicolás González que anticipó al cierre defensivo visitante y subir el 2 a 0 al marcador.

Con dos goles en contra, pero por sobre todas las cosas, con un planteo que no lograba siquiera hilvanar dos pases seguidos, Carlos Rodao envió a Octavio Colo al campo de juego, para tratar de obtener una salida más fluida por el sector derecho.

Enseguida el equipo quedó conformado con un 3-4-3 y en pocos minutos el ex aurinegro creó más peligro que el resto de sus compañeros en todo el primer período.

Para el segundo período Rodao envió a Facundo Puente en sustitución de Facundo Rodriguez (que sin dudas sintió el estar parado durante varios días por lesión) para poder batallar más en el medio campo y lanzar más al ataque a Gonzalo Curbelo, acompañando a Roberto Toranza y Marcelo Tapia que no cumplia una buena labor.

Villa Teresa a puro corazón acorralaba a Progreso, pero no lograba destrabar una defensa en donde Javier Méndez se convertía en figura y Carlos Canobbio rechazaba hasta el viento. Los gritos constantes de Mauricio Loffreda hacia sus compañeros de salir de adelantar las líneas, no tenía respuesta por el cansancio y la superioridad numérica que imponía la visita en el mediocampo.

Sin embargo el partido parecía controlado por Progreso que tenía dos goles de distancia, hasta que a los 64 minutos llegó la polémica del encuentro.

Una nueva arremetida del “villa” terminó con un centro al área que Gonzalo Curbelo conectó con un medido cabezazo que fue abajo a la derecha de Carlos Techera que tuvo que efectuar una atajada espectacular y salvar el descuento rojiblanco.

Ante la sorpresa de todos los presentes el línea Marcelo De León asiste a Javier Bentancur marcando la mitad del campo y de esta manera el gol de Villa Teresa.

Las nuevas tecnologías hacen que en pocos segundos, hasta los propios jugadores sepan que fue lo que realmente ocurrió en el campo de juego y ese error del asistente fue casi letal para los locales que estuvieron más de diez minutos desorientados en el campo y cada ocasión era propicia para protestar, estando muchos de los futbolistas más “afuera” que dentro del campo de juego.

Tres minutos después del gol convalidado por Bentancur a instancias de De León, Diego Viña en el área rival como en un calco de la jugada de Curbelo nuevamente ganó de arriba y otra vez Techera se estiró como si fuera de hule para enviar el balón al corner.

Marcelo Méndez observando que su equipo era superado en la mitad del campo de juego envió a Ignacio Aviles en sustitución de Danilo Cócaro buscando una mayor entrega y marca en dicho sector donde se encontraba en inferioridad.

Los minutos se fueron consumiendo y el asedio rojiblanco fue cesando por una mejor ubicación sectorial de los futbolistas locales y también por el cansancio que comenzó hacer su obra en los bravos jugadores de Rodao.

Marcelo Méndez observó esto último y envió al “patita” Millacet al campo de juego buscando sus corridas vertiginosas en una zaga que ya estaba más en campo rival que en el propio.

Sobre el final del partido, Bentancur expulsó en forma incorrecta al propio Millacet y dejó al local con un hombre menos en los últimos instantes de adición.

Sin embargo Villa Teresa que había dejado todo en el campo de juego, ya no tenía la fuerza necesaria para llegar al empate y con el pitazo final los “gauchos del Pantanoso” festejaron la vuelta a primera en el año del Centenario de su fundación.

En este momento de gloria no nos podemos olvidar de la comisión directiva de Progreso que en momentos muy difíciles le pusieron el pecho a las balas encabezados primero por Andrés Alvarez y en éste último año por Fabián Canobbio.  Por supuesto el saludo a todos nuestros amigos como nuestro compañero Mauricio,  a uno de los mejores dirigentes de nuestro fútbol como es Agustin Montemuiño, a Fernando, Pintos, Daniel, Mario “el cantante”, Lalo de La Teja, el Oso, Jorge, las “chicas de atrás del arco” y tantos y tantos que dia a dia trabajan y sueñan por un Progreso grande.

También quiero destacar a los futbolistas y entrenadores de Villa Teresa, (como asi también a Mario Luzardo el presidente del sacrificio diario del “Villa”),  que mostraron un gran amor por la camiseta, propio de los grandes. Cuando nadie daba nada por ellos, lograron revertir su serie en Cerro Largo, posteriormente vencieron a Cerrito en dos ocasiones y finalmente cayeron frente a Progreso pero sin antes pelear hasta último minuto.

Con éste encuentro finaliza una nueva temporada del fútbol de la Segunda Profesional. Nuestro equipo periodístico logró por 12ª. temporada ininterrumpida poder estar en todos los escenarios y cumplir con el multimedio que tiene la divisional con un programa radial diario, TV (3 veces por semana), los comentarios en el Suplemento Ovación de el diario El País, una página web orgullo del fútbol del ascenso y el único medio que transmitió fecha a fecha todo el torneo.

Por último en un dia muy especial para los gauchos, el recuerdo como siempre para Daniel “Pistola” Marsicano un gran luchador de Progreso, que seguramente cuando finalizó el partido desde el más allá grito fuerte “Progreso carajo”.