Con un primer tiempo donde casi fue un espectador, el arquero «buzón» se convirtió en figura en los segundos cuarenta y cinco minutos de juego.
Primero salvó un mano a mano con Emanuel Beltrán, luego un cabezazo de Bellini que pegó en el travesaño, apareció en «palomita» Facundo Pérez y allí con grandes recursos contuvo, para una actuación magistral del arquero sudamericano.
Gritó, ordenó y atajó…. Juan Ignacio González fue la gran figura